El piso pélvico es el conjunto de músculos y ligamentos que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior. Su función es mantener los órganos pélvicos (vejiga y uretra, útero y vagina; y recto) en la posición correcta.
¿Por qué se está debilitando?
Dieta incorrecta: malos hábitos, excesos o dietas extremas.
Embarazos naturales y nacimientos.
El período de dilatación y expulsión daña la musculatura. Durante el embarazo hay un aumento de peso, lo que provoca una mayor presión sobre el piso pélvico.
Haz deportes de impacto. Correr y saltar provocan un aumento de la presión intraabdominal.
Soluciones
Factor clave, dieta. Apuesta por frutas, verduras y proteínas sin grasa, que promueven
firmeza y tensión muscular.
Cuando vas al baño. No doble la parte baja de la espalda e intente mantener la columna recta.
Practica ejercicios a diario. En Kegel’s, contraiga los músculos de la misma manera que contendría la micción.
Respiraciones
Cómo hacerlo: siéntate cómodamente en el suelo, ligeramente doblado, con las piernas
cruzado y con las manos colocadas en la pelvis, en la región del perineo. Realice al menos 10 ciclos de inspiración / exhalación ganando amplitud mientras cuenta lentamente de 1 a 10.
Beneficios: los gestos respiratorios influyen en casi todas las regiones del tronco. Aprender a respirar bien ayudará a aumentar la resistencia en ejercicios cardiovasculares más exigentes, como correr.
Postural
Cómo hacerlo: de pie con los pies juntos y los talones apretados, alargue la columna vertebral como si quisiera llegar al cielo. Mantenga los brazos en X con las palmas de las manos sobre los hombros. Luego inclina el peso sin perder altura o equilibrio. Haz esta pequeña mecedora 3 veces y descansa.
Beneficios: Es el método preventivo más efectivo. Cuidar las posturas diarias ayudará a tener una buena calidad muscular. Este ejercicio también ayudará a estirar la columna y mantenerla recta.
Contracciones
Cómo hacerlo: Acuéstese cómodamente en el piso, con las rodillas dobladas y contraiga los músculos del perineo hacia la garganta. Hazlo lentamente, manteniendo la posición.
Beneficios: Al contraer y relajar los músculos del piso pélvico aumenta su fuerza y resistencia. Se previene la incontinencia urinaria. También se pueden hacer de pie. Combinándolos, los resultados son más efectivos.