Este lunes, la Familia Real ha presidido los actos de la Fiesta Nacional, donde hemos visto a la Reina muy cómplice de su pequeña hija.
Un año más, los Reyes Felipe VI Y Sra. Letizia han presidido el Día de la Fiesta Nacional. Sin embargo, 2020 no ha sido un día como el de años anteriores. Debido a la pandemia de coronavirus, el Ministerio de Defensa ha decidido suspender el tradicional desfile, que este lunes se ha celebrado sin el carácter multitudinario de antaño, para evitar aglomeraciones y, en consecuencia, posibles contagios ante el avance del Covid-19, que ha obligado a confinar de nuevo la capital y otros municipios de la Comunidad de Madrid el pasado viernes. .
A pesar de todos los cambios y la carácter reducido del día, los reyes y sus hijas, los Princesa eleanor y el Infanta sofia Ellos han sido los protagonistas de este austero evento que ha comenzado sin saludos para frenar los brotes de la enfermedad y que no se parece en nada a los desfiles de años anteriores. Tradicionalmente, el evento comenzaba en la Plaza de Cuzco, alrededor de las 11 de la mañana con el salto de un paracaidista y el izamiento de la bandera española frente a la Tribuna Real, ubicada en la Plaza de Lima. Este año, sin embargo, el evento se llevó a cabo en el Plaza de la Armería del Palacio Real. Allí hemos podido ver un detalle muy significativo que revela lo estrecha que es la relación entre la soberana y sus hijas.
Y es que desde que ha comenzado el acto hasta que prácticamente ha llegado a su fin, el monarca ha sido muy consciente en todo momento de su pequeño, especialmente el más joven de la familia. Es una imagen a la que estamos acostumbrados. Porque en cada acto público al que asiste con sus hijas, Doña Letizia actúa como madre y maestra de ellas. Bien educados están, desde muy pequeños, en el duro trabajo de ser herederos de la Corona española. Pero a Letizia, perfeccionista y soberana ejemplar, le gusta recordar a sus hijas cada detalle de la diferente puesta en escena a la que se enfrentan la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía. Ha sido precisamente con éste con quien esta mañana se ha mostrado muy comunicativa durante el Día de la Fiesta Nacional.
No han dejado de hablarse
Madre e hija han charlado, han intercambiado confidencias… No han dejado de hablarse durante todo el acto. ¿De qué estaban hablando? Del trabajo, por supuesto. Doña Letizia ha marcado las pautas de este acto tan particular para Doña Sofía, quien tomó buena nota de todo lo que su madre le susurraba. Porque Letizia, en su afán por enseñar a su pequeña, no ha dudado en acercarse a ella en varias ocasiones para asegurarse de que la escucha con atención. Sofía no solo la escuchó con atención: también miró con enorme complicidad a su madre, que nunca pierde la oportunidad de marcar el camino a los futuros jefes de familia del Trono de España. Cualquier ocasión es buena para formar y perfeccionar a quienes en unos años tomarán su testimonio en el palacio.